martes, 1 de abril de 2008

El Camino del Medio

Nos cuesta mucho ser equilibrados, solemos interpretar las cosas como exclusivamente buenas, o exclusivamente malas. No intentamos conectarnos con la sabiduría, y sus miles de matices de colores. Colores pueden haber miles y millones, y con la sabiduría pasa igual, no hay dos acontecimientos iguales, no se pueden interpretar las situaciones siempre con los mismos conceptos rígidos. Es conveniente escuchar "esa otra voz" sutil de nuestro interior, y a nuestras sensaciones, así iremos comprendiendo a lo que se refieren "los maestros" cuando hablan del "Camino del Medio".

Primeramente quiero hablar en este blog sobre La Deidad Femenina Olvidada, de como se ha puesto al nivel de un "bien" cualquiera, como si se tratara de un "objeto" mas; a la Madre, a la Hermana, y a la Esposa.

El hombre representa El Sol, el Fuego, y el Aire; la parte derecha del cuerpo, y el hemisferio izquierdo. La mujer representa La Luna, el Agua, y la Tierra; la parte izquierda del cuerpo, y el hemisferio derecho. Se ha interpretado que el hombre es luz, y que la mujer es oscuridad, que el hombre es "bueno" y la mujer es "mala". Y como podemos observar, si nos regimos por esa lógica, para ser realmente "buenos" tendríamos que encarnar solo los elementos masculinos en nuestra vida, pero nadie puede caminar únicamente con su pierna derecha, tampoco se puede trabajar cómodamente con una sola mano (la derecha claro), y no se puede vivir sin Agua, ni sin La Tierra, ni sin La Luna. Por lo que, aquí es donde falla la teoría de la superioridad del hombre; aquí es donde la lógica de, "ó es bueno ó es malo" falla... Si la mujer es algo malo y repudiable, ¿como pueden nacer de una mujer?, ¿no están etiquetándose ellos mismos con ese concepto?, si una fábrica de un coches es mala, el coche irremediablemente también lo será. Únicamente razonamos en conceptos de, ó "yo soy superior" ó "tú eres superior", y parece que no entendemos otra cosa.

Hubo un tiempo en que la Madre Naturaleza se veneraba y se respetaba, existía el culto a las Divinidades Femeninas, existía una situación de igualdad social, y con ello nos trasladamos a la Cultura Celta. Aquí se encontraban numerosas figuras femeninas desempeñando cargos públicos de máxima autoridad, también eran enviadas a menudo como embajadoras, una mujer era responsable de sus propias deudas, pero no de las de su marido. Los celtas incluían a sus mujeres en su vida política y religiosa: profetisas, druidesas, bardas, guerreras, médicos etc...

Y entonces, ¿que pasó para que la historia cambiara tan drásticamente?, ¿porque el actual mundo gobernado exclusivamente por hombres, es un caos constante? ¿No será que el hombre al condenar a la mujer, se condenó el mismo? ¿y que la mujer representa a la Madre Naturaleza y sin ella no puede vivir? Por ello ahora vemos esta discriminación reflejada en el medio ambiente, cada vez está más contaminado, está más cargado de nuestras basuras físicas, emocionales y psicológicas. Y aquí incluyo, tanto a hombres como a mujeres, porque la mujer contamina a la Naturaleza de igual forma que el hombre con su actitud de infravalorarse, con su baja autoestima, y siendo inconsciente de su PODER. Ya es hora de que las mujeres se levanten y recuperen su dignidad, que se respeten y se amen a ellas mismas. Se puede crear un mundo mejor, donde el hombre y la mujer, vivan en armonía, estén juntos y cooperen, sin conflicto y se respeten y se honren como representaciones de Dios que son. Nuestro ser está formado por la combinación de energías masculinas y femeninas, en los hombres mas energía masculina (YAN), y en las mujeres mas energía femenina (YIN), pero a fin de cuentas, ambos tenemos una parte del otro en nosotros, y si repudiamos al otro, nos repudiamos a nosotros mismos.

Artículo tomado del blog: Reverenciando Nuestra Femineidad.

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